El interrogatorio se centró en si el mosso prestó ayuda a Puigdemont para marcharse discretamente de Girona y poder llegar hasta Bruselas a espaldas de sus propios escoltas, según publica 'La Vanguardia'.
El fin de semana del 28 y 29 de octubre, después de la proclamación de la independencia en el Parlament, Puigdemont se dejó ver en Girona junto a amigos y su familia el sábado, pero el domingo no se le vió y el lunes se supo que estaba en la capital belga.
Este veterano escolta, que no estaba destinado a la seguridad del presidente catalán, fue visto en la casa de Sant Julià de Ramis (Girona) de Puigdemont ese sábado 28 de octubre y el domingo, cuando llevó un coche a la casa --no era un vehículo oficial de los Mossos--.
Ahora se sospecha que Puigdemont pudo abandonar su vivienda escondido dentro de este vehículo, sin que sus escoltas lo supieran, y posteriormente trasladarse hasta Marsella, donde cogió un vuelo a la capital belga.
Según el citado diario, no preocupa tanto a los Mossos lo que ha hecho este sargento en Bruselas, donde ha sido visto junto a Puigdemont, ya que se marchó tras pedir vacaciones y estaba allí a título personal sin placa ni pistola.