Balada triste de trompeta de Alex de la Iglesia (dos premios) y También la lluvia, de Icíar Bollaín (tres), fueron las grandes perdedoras de la noche. La cuarta película en discordia, Buried (Enterrado),de Rodrigo Cortés, se alzó también con tres premios.
Otro galardonado ha sido Javier Bardem que ha conseguido el Goya el mejor actor por "Biutiful", de Alejandro González Iñárritu, que le convierte, con cinco premios, en el actor más premiado en la historia de estos galardones y que ha dedicado a su mujer y a su hijo, por despertarle cada día "el corazón y la sonrisa".
Internet es el presente
Uno de los momentos más esperados de la gala era el discurso del presidente de la Academia, Álex de la Iglesia. Ante la atenta mirada de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, y cuando hace unos días se conocían los desastrosos resultados del cine español en 2010, de la Iglesia no dudó en lanzar un juicio sumarísimo: "Sin público, nada de esto tiene sentido". Tampoco quiso obviar los sucesos recientes en torno a la gestación de la ley Sinde , motivo por el cual abandonará en las próximas horas su cargo: "Las reglas del juego han cambiado (...) Internet no es el futuro como creen algunos, es el presente. Ese público que hemos perdido no va al cine porque está en su casa delante de una pantalla de ordenador". Y zanjó: "No tenemos miedo a Internet, es la salvación de nuestro cine". La despedida llegó así: "Quiero despedirme en mi última gala como presidente: qué mas da ganar o perder si podemos hacer cine, somos cineastas, contamos historias para que la gente viva en ellas, creamos sueños".
Homenaje a Camus
Finalmente, y tras el emotivo homenaje al Goya de Honor, Mario Camus, el premio mejor película hispanoamericana fue para "La vida de los peces", del chileno Matías Bize, y el de mejor película europea fue para "El discurso del rey", que se llevaba esta misma noche en Londres siete premios BAFTA de la academia británica.