El suceso tuvo lugar en torno a las 9.20 hora local (3.20 hora peninsular española), cuando por un fallo en los frenos, el conductor del autocar perdió el control del vehículo y se precipitó por un barranco de setenta metros de profundidad, según publica el diario filipino 'Manila Bulletin'.
El superintendente de la Policía local, Agrimero Cruz, ha informado de que los equipos de rescate siguen con sus tareas y que por el momento han rescatado un total de 35 cadáveres. Esas personas murieron en el acto, mientras que las otras 5 víctimas fallecieron en el hospital, según el diario filipino 'The Inquirer'.
Los operarios han logrado rescatar con vida a nueve personas, que sin embargo se hallaban inconscientes. Iban a bordo del autobús siniestrado un total de 49 personas. El conductor del autobús, John Patrick Flores, que sobrevivió al saltar del autobús antes de que cayera al barranco, ha señalado que se produjo un fallo mecánico con el engranaje de los frenos.
Por su parte, el gobernador de Benguet, Néstor Fongwan B. ha declarado que el gobierno provincial ha extendido la asistencia apropiada a los familiares de las víctimas mortales, así como las personas heridas, como parte del compromiso del gobierno local para ayudar a los accidentados, teniendo en cuenta que el incidente ocurrió en su jurisdicción.