Cuando la polémica concursante del Gran Hermano británico se enteró el año pasado que padecía un cáncer cervical que acabaría con su vida, decidió vender sus últimos meses. Por eso, últimamente sus apariciones en televisión eran constantes. Goody decidió vender cualquier aspecto relacionado con su vida privada a los medios con el objetivo de dejar el dinero recaudado a sus hijos.
Desde aquel momento hemos presenciado su boda con Jack Tweed, seis años menor que ella y pendiente de una sentencia judicial por agredir a un taxista. Con esta exclusiva, la gran hermana consiguió alrededor de un millón de euros. Dos semanas después decidió convertirse al catolicismo a través de de una ceremonia de bautismo en la que también incluyó a sus hijos.
Ya en estos momentos, el estado de salud de Jade Goody, era precario. Así que poco tiempo después decidió salir del hospital para cumplir su último deseo de morir en casa. Éste momento, también rodeada de una gran cantidad de medios en su salida del hospital, fue su última aparición en público.
Su paso por Televisión
Jade Goody
fue una polémica concursante de Gran Hermano en 2002. Su paso por este reality show no dejó indiferente a la audiencia que después de salir del concurso le siguió por todas sus apariciones televisivas y revistas.
Cinco años después decidió participar en un gran hermano para famosos. Aquí, Goody fue objetivo de crítica al enfrentarse a una compañera increpándola con un insulto racista por su origen indio. Como consecuencia, su popularidad cayó en picado pero Goody era conocida en todo el mundo.
Un año después, en2008, aceptó participar en una edición de origen indio como modo de disculpa. Pero su estancia se vio interrumpida cuando se le detectó el cáncer y por eso abandonó el concurso.