El tribunal noruego condena a 21 años de prisión al ultraderechista Breivik

cuatro.com 24/08/2012 10:02

El tribunal que juzga al asesino confeso de 77 personas el 22 de julio de 2011 en Noruega, Anders Behring Breivik, lo ha condenado a 21 años de prisión.

Breivik, de 33 años, imputado por cargos de homicidio y por terrorismo en un atentado con coche bomba en Oslo y en un tiroteo posterior en la isla de Utoya, ha sido declarado mentalmente sano y capaz de cumplir la condena.

Noruega vivió ese 22 de julio su peor tragedia desde la II Guerra Mundial y está expectante ante una resolución que el propio Breivik ya ha advertido de que podría recurrir.

En concreto, el acusado ha anunciado que presentará un recurso si el tribunal lo considera mentalmente incapaz y determina que debe ser encerrado en un psiquiátrico en lugar de en una cárcel. Ser considerado un enfermo sería "peor que la muerte", según advirtió.

La fiscalía ha pedido su reclusión en un psiquiátrico, mientras que los expertos médicos consultados a lo largo del proceso han dado versiones contradictorias en torno a la salud mental de Breivik.

Si finalmente el tribunal le declara capaz, el Ministerio Público pedirá 21 años de cárcel, aunque dicha pena puede ampliarse si las autoridades consideran que, pasado ese tiempo, sigue siendo un peligro para la sociedad.

Contra el multiculturalismo

Para el autor confeso de la masacre, su acción tenía un motivo. Actuó, según alegó durante el juicio, por "necesidad", en aras de una ideología nacionalista y por odio hacia el multiculturalismo.

Durante diez semanas, un tribunal de Oslo ha escuchado a testigos, expertos y al propio acusado para averiguar los motivos y circunstancias de la matanza, que comenzó con la explosión de un coche bomba frente a oficinas gubernamentales en la capital Noruega.

Ocho personas fallecieron en este primer ataque, mientras que otras 69 --en su mayoría adolescentes-- perdieron la vida en el tiroteo indiscriminado que Breivik perpetró en la isla de Utoya.

El acusado espera la lectura de la sentencia en una celda de tres habitaciones en la que dispone de ordenador, una cinta para correr, acceso a televisión y a periódicos.