Ascienden a siete los muertos por la explosión de gas en Manhattan

Noticias Cuatro/Agencias 13/03/2014 07:09

Según informa el diario 'New York Post', se han encontrado otros dos cuerpos, después de que poco después de media noche se hallara a una cuarta persona sin vida bajo los escombros.

Las otras tres víctimas ya han sido identificadas, según el diario. Se trata de Griselde Camacho, de 48 años, responsable de seguridad pública en Hunter College; Carmen Tanco, de 67 años, asistente dental; y Rosaura Hernandez, de 21 años.

El Consulado de México en Nueva York confirmó a la agencia Notimex que dos de los fallecidos, dos mujeres, eran de nacionalidad mexicana. Una de ellas, según la agencia oficial, es Griselda Camacho. Además, el Consulado informó de que al menos un hombre mexicano se encuentra hospitalizado.

El alcalde de Nueva York, Bill De Blasio, ha dado por buena la tesis de que una explosión de gas ha sido la causante del derrumbe de dos bloques de apartamentos en Harlem Este.

Previamente, la compañía eléctrica local, Con Edison, había informado de que recibieron una llamada telefónica hacia las 9:15 horas alertando de que había un fuerte olor a gas. La explosión se produjo en torno a las 9:30 horas y su equipo llegó alrededor de las 9:40 horas. "Dos equipos de Con Edison fueron enviados a las 9.15 y llegaron justo después de la explosión", ha precisado la compañía.

"Ciertamente tiene todos los signos" de ser una explosión de gas, ha reconocido un portavoz de Con Edison, Alfonso Quiroz, al 'New York Post'. "Estamos esperando para inspeccionar las líneas con el fin de determinar la causa", ha añadido.

OLOR A GAS

Uno de los desaparecidos en el derrumbe es Jordy Salas, marido de Jennifer Salas, de 20 años. La mujer ha relatado al 'New York Times' que en su edificio había un apartamento en cada una de las seis plantas y que "anoche (el martes) olía como a gas, pero luego el olor se disipó y todos nos fuimos a dormir".

"Intentamos encontrar la fuente del gas, pero como el olor desapareció nos fuimos a dormir", ha contado entre sollozos, mientras rogaba a los bomberos que encontraran a su marido.

Su relato coincide con el de otros testigos. La propietaria de la iglesia que se encontraba en el bajo de uno de los edificios, Carmen Vargas-Rosa, ha confirmado que ya el martes por la noche olía a gas en la zona. "Anoche, cuando salimos de la iglesia, en la esquina de la calle había olor a gas", ha afirmado, citada por la cadena CBS.

"Iba y venía, así que pensé que era de la tienda de la esquina por lo que me dirigí a sus propietarios y se lo dije y ellos dijeron que lo mirarían, y luego me fui a casa", ha relatado. Vargas-Rosa ha señalado que no sabe si había alguien dentro del edificio, pero ha indicado que cuatro de sus inquilinos están desaparecidos.

"Una de ellas tenía el día libre, así que lo más probable es que estuviera en el edificio", ha explicado. "Hay una madre que tiene un hijo enfermo, así que salvo que tuvieran una cita en el hospital, podrían estar dentro y hay un joven y su mujer que van tarde a la escuela, así que podrían estar durmiendo y no podemos contactarles", ha agregado.