El secuestro comenzó a las tres de la madrugada de este sábado, cuando la Policía fue alertada de varios disparos en el interior del domicilio. El autor de la llamada fue, presuntamente, una persona que se encontraba en el interior del domicilio y que había conseguido escapar del agresor.
Más de 40 efectivos, entre ellos miembros de la unidad de intervención especial SWAT y varios negociadores, se desplazaron al lugar mientras se ordenaba la evacuación de las viviendas anexas.
El consiguiente período de negociaciones resultó infructuoso. "Nos hemos comunicado con el individuo de manera intermitente. No hemos podido mantener la comunicación con él. Estamos actuando de la manera más segura posible", según informó en esos momentos la sargento del departamento de Policía de Aurora, Cassedee Carlson.
Finalmente, la Policía irrumpió en el interior de la vivienda y acabó con la vida del sospechoso. En el interior fueron hallados los cadáveres de tres de los rehenes, cuyos nombres y edades todavía no han sido dados a conocer.
Colorado ya fue escenario de una matanza que se cobró la vida de una docena de personas el pasado mes de junio en unos multicines de esta ciudad.