"Descubrimientos como estos demuestran la creciente capacidad de las fuerzas de seguridad para proteger a los civiles de ataques indiscriminados con explosivos", ha dicho el Ministerio del Interior, según ha informado la agencia afgana de noticias Jaama Press.
Los servicios de Inteligencia afganos anunciaron el lunes la detención de dos terroristas que iban a inmolarse en la capital. Un día antes, las fuerzas de seguridad se incautaron un camión cargado con más de 2.500 kilos de explosivos que iba a ser usado en un atentado en Kabul.
La última detención ha sido anunciada un día después de la muerte de cerca de 60 personas en dos atentados perpetrados por los talibán en las provincias de Paktia y Ghazni (este).
Durante la jornada de este mismi miércoles han sido arrestados cinco policías afganos por su presunta vinculación con el atentado perpetrado contra un cuartel de la Policía en Paktia, que se saldó con al menos 41 muertos.
El ataque fue reivindicado por los talibán, que también asumieron la autoría de otro atentado perpetrado en la vecina provincia de Ghazni con varios coches bomba cerca de las oficinas del gobernador regional, matando al menos a 15 personas.