La violencia continúa en Siria. Después de un fin de semana violento en el que el Ejército de Bashar al Assad masacró la ciudad de Hula con armamento pesado, los aviones vuelven a bombardear a la población de Hama.
Unas 41 personas han muerto en las últimas 24 horas a causa de los bombardeos en esta ciudad siria, el preámbulo de la visita de Kofi Annan que con el respaldo unánime de la ONU se reunirá con el presidente sirio Bashar al Assad.
El Consejo de Seguridad de la ONU condenó la masacre del Ejército en Hula y los observadores de las Naciones Unidas confirmaron la muerte decenas de hombres, mujeres y niños, que el Gobierno se encargó de desmentir.
El fin de semana el fuego contra la población civil también llegó a Hama, donde los carros de combate y los vehículos de combate de la infantería abrieron fuego el domingo contra algunos barrios en respuesta a una serie de ataques de los rebeldes del Ejército Libre Sirio contra puestos de control y otras posiciones de las fuerzas del régimen de Bashar al Assad, según fuentes de la oposición.
Entre los muertos figuran cinco mujeres y ocho niños, según informó en un comunicado el Consejo de la Revolución de Hama. Estas informaciones no han podido verificarse por fuentes independientes.
Kofi Annan se reunirá con el presidente Bashar al Assad
El mediador internacional, Kofi Annan, ha declarado este lunes a su llegada a Damasco que el Gobierno sirio debe adoptar medidas audaces que demuestren su intención de resolver pacíficamente la crisis.
Asimismo, ha anunciado su intención de mantener "discusiones serias y francas" con el presidente sirio, Bashar al Assad, con quien se reunirá mañana en Damasco, según precisó el Ministerio sirio de Asuntos Exteriores.
Kofi Annan consiguió el pasado 12 de abril la entrada en vigor de un acuerdo de alto el fuego en Siria, pese al cual desde entonces han muerto cientos de personas a causa de la violencia.
Annan también se ha mostrado "horrorizado" por la matanza de Hula. La llegada del mediador internacional a Siria se produce un día después de que el Consejo de Seguridad de la ONU condenase el bombardeo perpetrado el pasado viernes por las fuerzas del régimen sirio sobre la localidad de Hula (oeste), que causó la muerte de al menos 108 personas, entre ellas numerosos niños.