En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, Iglesias ha afirmado que si él fuese presidente del Gobierno se sentiría "vinculado" por lo que opinasen los catalanes en un referéndum, pero que la única manera de articularlo jurídicamente es a través un "proceso constituyente".
El líder de Podemos ha reconocido que un proyecto constituyente implica "que se abra una discusión en todo el país y traducir la voluntad política de los catalanes en el Derecho". Sin embargo, preguntado si entonces los españoles tendrán la última palabra al votar esa reforma constitucional, ha optado por responder que él no habla de reforma constitucional sino de proyecto constituyente.
Con el mismo argumento ha evitado aclarar si, en las próximas elecciones generales, Podemos condicionará su eventual apoyo al futuro Gobierno a una reforma constitucional. "Nosotros somos partidarios no tanto de una reforma constitucional como de un proyecto constituyente", ha zanjado.
En la última jornada de campaña para las elecciones catalanas del domingo, Iglesias ha destacado que estos comicios servirán para configurar "la parrilla de salida" para las generales. "Los cuatro partidos estatales nos estamos midiendo y la definición de esa parrilla va a contar mucho para las generales", ha dicho.
Además, ha dejado claro que no apoyará ningún gobierno catalán del que forme parte el actual presidente, Artur Mas, ni nadie de su partido, y ha insistido en un gobierno liderado por el candidato de Catalunya Sí Que Es Pot, Lluís Rabell, con el apoyo del PSC, de ERC y de la CUP "pero no del partido del señor Mas".
Iglesias ha rechazado el "España nos roba" que esgrimen los independentistas y el intentar enfrentar territorios. Así, ha destacado que más bien "a España le roban los corruptos", y que éstos hablan distintas lenguas y tienen distintos carnets de partido.