El ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, lejos de amilanarse se crece el día de la Fiesta Nacional tras sus polémicas declaraciones en las que defendía la necesidad de "españolizar a los alumnos catalanes". "Orgulloso" y "respaldado" por el resto del Gobierno, así se ha manifestado ante un grupo de periodistas durante una conversación informal en la tradicional recepción ofrecida por los Reyes en Palacio Real. Artur Mas no ha estado presente en cuerpo pero sí en la mente y las palabras de los allí presentes ya que ha monopolizado el tema de los corrillos, eso sí, Don Juan Carlos ni una palabra. Algo más locuaz se ha mostrado el príncipe quien ha asegurado que "Cataluña no es problema" así como recomienda a políticos e instituciones "contribuir a rebajar tensiones, con responsabilidad". El Presidente también confía en que todo se arregle.