Videgaray ha asegurado ante el Senado mexicano que el Gobierno de Enrique Peña Nieto sigue atentamente la crisis política en España, un país "entrañable" al que le unen "la historia y las oportunidades en el presente y en el futuro". "México es un aliado fundamental y un amigo de España", ha subrayado.
El jefe de la diplomacia mexicana ha condenado los incidentes violentos registrados en el marco del referéndum del 1 de octubre y ha apuntado que "la violencia nunca debe ser el camino para la solución de las controversias". En este sentido, ha abogado por resolver cualquier disputa por la vía pacífica y la legalidad.
"Si a pesar del diálogo político, el gobierno catalán declara unilateralmente la independencia, el Gobierno de México, en apego al derecho internacional, no reconocerá a Cataluña como un Estado independiente", ha apostillado, según un comunicado de su Departamento.