El Gobierno intenta impedir que el dictador sea enterrado en La Almudena por razones de seguridad y orden público

Situaciones como el enfrentamiento entre las Fémen y los falangistas el pasado 18 de noviembre son los ejemplos que alega el gobierno para prohibir que los restos de Franco acaben en la Almudena.

Además de enfrentamientos dentro de la cripta, donde la policía no podría acceder por ser un lugar sagrado; El informe alega riesgo de amenaza terrorista, en plena alerta 4, por la alta concentración de ciudadanos. Así como colapsos en fechas señaladas, como el 20N, o el derecho de quien quiera visitar la catedral (y no la tumba) y no pueda, por motivos de seguridad.

En resumen: Que el derecho de la familia de Franco no está por encima del derecho de miles de ciudadanos que circulan por la zona. Es lo que dice el informe del gobierno, de 12 páginas, que cierra el expediente. El paso final antes de que el consejo de ministros de luz verde a la exhumación, sin fecha prevista para ello.

La familia tiene diez días para presentar alegaciones al expediente administrativo que pondrá en marcha el proceso. Luego faltará que el Tribunal Supremo, se pronuncie sobre el recurso, que con toda seguridad volverá a presentar la familia Franco.