La Audiencia Nacional concluye que la primera mujer juzgada por yihadismo conocía en qué consistía el DAESH

EUROPA PRESS 18/11/2016 14:48

La Audiencia Nacional ha concluido en la sentencia por la que condena a cinco años y dos meses de prisión a Samira Yerou --primera mujer mayor de edad juzgada por yihadismo-- que, lejos de ignorar la actividad del Estado Islámico, "sabía todo lo que tenía que saber de la organización a la que se había incorporado".

La Sala de lo Penal ha confirmado la condena por el delito de pertenencia a organización terrorista alcanzada tras un acuerdo de conformidad con el Ministerio Público después de que la yihadista reconociera que había viajado a Turquía con su hijo de tres años de edad y con la intención de desplazarse a Siria y enrolarse en el Estado Islámico.

La resolución recoge que la mujer comenzó a establecer contacto por las redes sociales con miembros del DAESH en territorios árabes y que se desplazó a Turquía con la intención de casarse con un muyhaidín y respaldar la lucha contra el presidente sirio, Bashar al Assad, tal y como expuso ella misma en la vista celebrada el pasado 10 de noviembre.

Sin embargo corrige la versión de ésta, quien dijo que el Estado Islámico se aprovechó de ella en un momento en el que estaba "muy mal" y que viajaba convencida de que en el territorio ocupado por el Califato se trataba muy bien a las mujeres.

CONTACTOS DE PRIMERA MANO CON EL DAESH

"Sabía todo lo que tenía que saber de la organización terrorista a la que se había incorporado y a la que acudía a unirse en Raqqa (Siria) junto con su hijo. Ya en octubre de 2014 la acusada le trasladaba a su interlocutor lo que los hermanos del DAESH llevaban a cabo degollando, azotando y cortando las manos añadiendo que llevaría su hijo con ella", reza la sentencia.

Y añade que, con los datos de los que disponía antes de partir a Turquía, "lejos de abandonar la idea de incorporarse a los territorios sirios, siguió en su empeño". La Sala tampoco pasa por alto lo expuesto por los peritos en el juicio oral sobre los contactos que guardaba Yerou con miembros relevantes del DAESH; "señal de no ser un tercero ajeno" a la organización.

Uno de los peritos que declaró ante el tribunal expuso que la mujer contaba con "numerosos contactos y de calidad", a diferencia de otros yihadistas, y que su estancia en Siria, país al que nunca entró, iba a ser diferente a la del resto de personas que se enrolan en el EI, puesto que tenía contacto directo con "emires pasadores" tal y como averiguaron al intervenir las llamadas.

El fiscal ya expuso en su escrito de acusación que en su permanencia en el centro de detención de Turquía, Yerou realizó numerosas llamadas a dirigentes islamistas y mantuvo conversaciones con varios dirigentes de la organización, entre ellos una mujer, identificada como Madina, que le decía que "todas las hermanas en el Estado" había conseguido incorporarse al DAESH en Siria.

RECONOCIÓ LOS HECHOS

En el acuerdo de conformidad alcanzado tras la vista, la condenada expuso su intención de rechazar "cualquier manifestación o participación en actos de violencia" y dijo que con el reconocimiento de los hechos busca también "reparar el daño que haya podido causar y dar un ejemplo para que otros se aparten de este modo de cualquier relación" con el Estado Islámico.

También confirmó en su declaración ante el tribunal que preside Ángela Murillo, que le fue incautada una memoria interna de un aparato electrónico que contenía más de una treintena documentos relacionados con sus actividades de adoctrinamiento y archivos de contenido salafista-yihadista destinada a enaltecer las actividades del Estados Islámico.

Además expuso tal y como se recoge en la sentencia que, tras una primera fase de adoctrinamiento, se incorporó al grupo terrorista para las tareas de reclutamiento y control para el envío de mujeres a través de Turquía a Siria. Para ello, contactaba con responsables encargados de facilitar el paso de la frontera y de la recepción en Turquía de "elementos relevantes" y del desplazamiento de individuos captado a Siria, entre otros.