"En unas semanas se va a poner en marcha una reforma del Decreto de extranjería para conceder permisos de residencia en España a extranjeros que adquieran una vivienda a partir de un nivel de precio", estas fueran las polémicas palabras de García-Legaz en su intervención en 'El Ágora' de 'El Economista' que han hecho saltar todas las alarmas, especialmente en el PSOE. Horas después y ante la avalancha de críticas, el gobierno se ha visto obligado a modular su propuesta y lo hecho rebajando la oferta a los extranjeros que compren una vivienda
Permiso de residencia lucrativo
En declaraciones a la Cadena Ser, García-Legaz ha dejado claro que la obtención de este permiso de residencia temporal lucrativo, "no permitiría trabajar en España, ni escolarizar a los hijos o acceder a la sanidad pública". También ha lamentado que se haya creado "cierta confusión" a partir de lo que es por ahora una "propuesta valorada" por el grupo de trabajo interministerial creado por el Gobierno de Mariano Rajoy con el objetivo de solucionar el exceso de stock de viviendas en zonas como el litoral mediterráneo.
García-Legaz ha señalado que lo que plantea este grupo de trabajo es otorgar el permiso de residencia lucrativo, que ya existe según la legislación actual, aliviando los "requisitos prolijos" y la "carga administrativa" que conllevan hasta ahora. "Lo único que se haría sería precisar que uno de los supuestos que contemplaría la residencia lucrativa sería adquirir una vivienda por encima" de los 160.000 euros.
El secretario de Estado ha rechazado las críticas de la oposición y ha calificado de "profundamente injusto" pensar que los ciudadanos rusos o chinos que estén interesados en comprar una segunda vivienda en España para residir aquí en periodo vacacional estén vinculados a las mafias. Según él, lo que pretende el Ejecutivo es equiparar la residencia lucrativa a lo que hacen ya otros países como Portugal que, ha comentado, "nos llevan la delantera" en este tipo de opciones.
Pisos por residencia
Las aclaraciones de García-Legaz son importantes porque a primera hora de la mañana apuntó a los 160.000 euros como el límite de precio de los pisos que se fijaría en esta medida, un importe que estima "equilibrado". "No se puede poner un límite de precio más bajo, porque generaría una demanda masiva de permisos de residencia", apuntó al respecto.
En cuanto a los destinatarios, Gargía-Legaz considera que los mercados ruso o chino son en los que se detecta "una demanda importante de vivienda en España".
Según indicó, se trata una iniciativa en la que trabajan desde la pasada primavera los ministerios de Empleo, Fomento, Interior y Asuntos Exteriores, y cuyo objetivo sería reducir el 'stock' de pisos que existe en España, donde actualmente "no se ve mucha capacidad de compra por la falta de crédito".