El protocolo general de actuación que suscribieron en la sede del Cervantes contempla la celebración de actividades para difundir "los aspectos más positivos de la alimentación, la cocina y la gastronomía española", tanto en España como especialmente en el exterior.
En cuanto al tipo de actividades que pueden organizar el Cervantes y la RAEG, Ansón ha apuntado que a los talleres y degustaciones podría sumarse la elaboración de platos ad hoc por parte de cocineros que idearían nuevas propuestas culinarias acordes con la modalidad de cada acto --por ejemplo, sobre música o moda).
Para Bonet, "la gastronomía es cultura y algo fundamental en la diplomacia cultural de un país", y por ello el Instituto Cervantes organiza con frecuencia actos para darla a conocer. "Con este nuevo acuerdo estamos obligándonos a aumentar el nivel de exigencia en los programas para divulgar la gastronomía y la enología españolas, que están en un nivel altísimo y gozan de gran prestigio en el mundo", ha apuntado.
Mientras, Ansón ha afirmado que la gastronomía es "una expresión cultural muy importante" y una actividad con "cuatro grandes cualidades: es saludable, solidaria, sostenible y satisfactoria". Según los datos de la asociación, este año habrá 18 millones de turistas gastronómicos.