Las patrullas de la Policía militar china permanecen desplegadas en la ciudad de Urumqi para evitar las protestas que han enfrentado la etnia uigur, originarios de la región, y los emigrantes han, mayoritaria en China, durante los últimos días. Aunque parece que cesan las revueltas. Las autoridades han levantado el toque de queda aunque han decidido mantener algunas restricciones de tráfico en varias de las principales calles de la ciudad, en las que están presentes policías armados patrullando.
Ahora parece que las protestas se extienden a otros puntos de la región. La policía de la ciudad china de Kashgar, en el extremo occidental de Xinjiang, ha informado de que también allí se han producido enfrentamientos entre manifestantes y policía tras los violentos disturbios de Urumqi.
Xinjiang ha sido durante mucho tiempo un hervidero de tensión étnica fomentado por una brecha económica entre los uigures y los chinos han, así como por el control del Gobierno a la religión y la cultura en las ciudades claves de la región, incluyendo Urumqi. Según fuentes oficiales, en los disturbios de esta última semana, han muerto al menos 156 personas, más de mil han resultado heridas y 1.434 detenidas, aunque se ignora todavía qué porcentaje de las víctimas es uigur o de la etnia mayoritaria han. El presidente chino, Hu Jintao, ha exigido un "castigo severo" para los responsables de los violentos disturbios.
Bloqueo a la libertad de expresión
La organización Reporteros Sin Fronteras y la emisora de radio internacional Radio Free Asia han denunciado este jueves la detención del uigur Ilham Tohti, profesor de la Universidad Central de Nacionalidades de Pekín y autor de un conocido blog de defensa de los derechos de esta etnia.
De acuerdo con el comunicado de RSF, Tohti ha sido arrestado después de publicar información sobre los sangrientos sucesos de Urumqi en su blog Uyghur Online (www.uighurbiz.cn). El blog del profesor uigur se encuentra bloqueado, algo que ya ocurrió dos veces este año, después de que su autor denunciara "amenazas y acosos".
Además, las fuerzas de seguridad ejercen en Urumqi para evitar que se graben imágenes de lo que está ocurriendo en la capital.
Continúan las acusaciones
El Gobierno chino continúa señalando a los separatistas del Congreso Mundial Uigur y a su líder, Rebiya Kadeer, como los instigadores de las revueltas. En relación a ello, la activista Kadeer, que desmiente las acusaciones, ha afirmado que en su opinión "el número de fallecidos en las manifestaciones es mayor que el aportado por las autoridades del país". También ha pedido que cese la violencia por ambas partes.