El fuerte viento convierte Andalucía en un verdadero desierto de arena
Primero fue el viento y el temporal. Después, el recuento de daños y la fotografía del destrozo. Árboles arrancados de raíz en plena calzada, un aparcamiento comido por la arena... Y la consecuencia más grave, una mujer herida al caer una rama sobre su coche.
Se hace difícil incluso caminar o mantenerse en pie con las ráfagas de viento de más de 100 kilómetros por hora. Los muros tampoco han podido resistir. Cerrados los parques infantiles y también los puertos de Tarifa y Algeciras.
A estos 30 subsaharianos se les buscaba en la costa almeriense desde hace días, pero la fuerza del mar les arrastró 300 kilómetros y hoy han aparecido en aguas del Estrecho de Gibraltar.
Pero, sin duda, el oleaje más impresionante se ha visto en Málaga, donde los golpes de mar alcanzaron hasta seis metros. Imposible bajar la Guardia con una alerta naranja que de momento sigue vigente.