Sólo está abierto al público el 25% del total de la que fuese capital maya hace mil años, un lugar que era el centro político, religioso y cultural del Imperio Maya. En este lugar podemos ver las pirámides que a los mayas le servían de calendario pero, sin duda, es un patrimonio que demuestra que eran unos auténticos expertos en matemáticas, astronomía, geometría y acústica.