Es Jaime, que con solo nueve años ha perdido a su madre, a su padre y a su hermana de 5 años. Una vela que se dejaron encendida desencadenó un fuego que arrasó una casa que utilizaba para pasar las vacaciones. Ahora, Jaime se recupera en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla de unas grabes quemaduras del 60% que le han dejado en estado crítico, aunque los médicos albergan un halo de esperanza de que salga adelanta.