Los efectos de la DANA en el día a día: Boni, con una enfermedad degenerativa, sigue sin ascensor en casa
En Catarroja, Boni, que padece una enfermedad degenerativa, sigue sin poder salir con libertad de su casa, porque su ascensor aún no funciona.
A pocos kilómetros, en Albal, Nuria trata de empezar de nuevo: su peluquería quedó destrozada por el agua.
Un año después, para algunos la vida sigue igual. En Catarroja, Boni, que padece una enfermedad degenerativa, sigue sin poder salir con libertad de su casa, porque su ascensor aún no funciona. En Charge.org están recogiendo firmas para presionar a la empresa del ascensor. "Lo que firmamos fueron cinco o seis meses y priorizaremos el montaje por tu situación. Cuando se cumple el tiempo te alargan otros tres meses o cuatro meses. Y ahora no tenemos la actividad de debemos de tener. No es normal tener que agendar una salida a la calle y no poder hacerlo cuando necesito y quiero
Laura Sierras, directora técnica Cruz Roja reconoce que en este tipo de situaciones "se han hecho más de 4.400 asistencias, pero en el caso de Boni no esperábamos este retraso, estamos en el año ya".
A pocos kilómetros, en Albal, Nuria trata de empezar de nuevo. Su peluquería quedó destrozada por el agua y, un año después, aún no ha podido abrir las puertas. Vuelve a las puertas donde comenzó y acabó su sueño. "Me encontré los muebles flotando. Cuando vi la cifra de 195.000 euros dejé de contar. He recibido cerca de 30.000 y he decidido montar otra peluquería más pequeña y poder dejar atrás la DANA. Yo soy una persona que no puedo parar", confiesa, aún con esperanzas.
Muchas casas siguen pendientes de demolición junto al Barranco del Poyo. El espectáculo den Chiva aún duele.
Para Boni, Nuria y muchos otros, la recuperación todavía no ha terminado.