Salud

¿El café alarga la vida? Un estudio español tiene la respuesta y dice cuántas tazas al día se deben tomar

cafe alarga la vida
Superar las 4 o 5 tazas, puede tener efectos adversosFreepik
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El café forma parte de la rutina diaria de millones de personas. Muchos no conciben salir de casa sin haber tomado su primera taza de café. Se trata de una especie de “ritual energético” imprescindible cada mañana. Pero esta bebida no queda solo en la mañana, es la compañera ideal de sobremesas, conversaciones y pausas laborales.

Más allá de su popularidad y de aportar energía, ofrece múltiples beneficios para la salud, ya que muchos estudios sugieren que, cuando se consume con moderación, puede tener un gran efecto positivo en el organismo. Además, beber café podría estar asociado con una mayor esperanza de vida.

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Este estudio, realizado por científicos españoles y publicado en medios internacionales, aporta una evidencia estadística que vincula el consumo habitual de café con una menor mortalidad, sobre todo en adultos mayores. Este hallazgo, lejos de quedarse en una conclusión genérica, llega incluso a determinar cuántas tazas al día serían óptimas para obtener beneficios y qué tipo de café tendría más impacto.

El estudio español que sostiene que el café alarga la vida

Un equipo de investigadores del Centro de Investigación Biomédica en Red de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) y de la Universidad Autónoma de Madrid, publicó un estudio en la revista científica Nutrients que ha llamado la atención de la comunidad médica internacional.

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A lo largo de más de diez años, estos científicos hicieron un seguimiento a más de 20.000 participantes españoles del estudio ENRICA (Estudio de Nutrición y Riesgo Cardiovascular en España), uno de los proyectos epidemiológicos más amplios realizados en el país.

Los participantes eran hombres y mujeres de entre 40 y 80 años, los cuales fueron monitorizados en relación con sus hábitos dietéticos, nivel de actividad física, historial médico y, por supuesto, su consumo habitual de café. A través de cuestionarios validados y análisis bioquímicos, los investigadores determinaron patrones de consumo de café con y sin cafeína, además de otras variables de estilo de vida.

El hallazgo más relevante fue que aquellas personas que bebían café de manera regular- entre 2 y 4 tazas al día - presentaban un riesgo significativamente menor de mortalidad por todas las causas, sobre todo por enfermedades cardiovasculares y metabólicas. En concreto, los consumidores moderados de café tenían un 27% menos de riesgo de morir durante el periodo de seguimiento, en comparación con quienes no lo consumían o lo hacían ocasionalmente.

Uno de los aspectos más novedosos del estudio fue la distinción entre tipos de café. Se observó que tanto el café con cafeína como el descafeinado podrían ofrecer beneficios, aunque el efecto era ligeramente superior en el primero. Esto querría decir que no solo la cafeína, sino también otros componentes bioactivos del café como los polifenoles, diterpenos y antioxidantes, desempeñan un papel importante en su efecto protector.

Esta investigación contempló factores como la dieta global, el consumo de alcohol y tabaco, el nivel educativo y la presencia de enfermedades crónicas, lo que aporta una mayor solidez estadística a sus conclusiones. Además, sus resultados tienen coherencia con los se obtuvieron en estudios internacionales realizados por la Universidad de Harvard, el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU. o la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), todos los cuales apuntan a una relación beneficiosa entre el café y la longevidad.

¿Cuántas tazas al día son recomendables?

Uno de los aspectos que más interés despierta en los consumidores es saber cuánto café se recomienda tomar al día sin que resulte perjudicial. La ciencia ha dado respuestas claras, aunque siempre hay que tener en cuenta sus matices en cada persona.

Según este estudio español y otros similares, la cantidad ideal de café para poder obtener beneficios sobre la salud parece que se sitúa en un rango de entre 2-4 tazas al día. Esto equivaldría aproximadamente a 200-400 mg de cafeína diaria. Esta cantidad ha sido considerada segura por instituciones como la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y la Mayo Clinic.

Los beneficios que se observan dentro de este rango incluyen un menor riesgo de enfermedad cardiovascular, una reducción de la inflamación sistémica, mejor regulación de la glucosa en sangre, disminución del riesgo de enfermedades neurodegenerativas como pueden ser el Alzheimer o el Parkinson y reducción de ciertos tipos de cáncer como el de hígado o endometrio.

No obstante, superar las 4 o 5 tazas al día de café puede producir el efecto contrario y tener más riesgos que beneficios, especialmente en personas sensibles a la cafeína. Entre estos efectos adversos estarían: ansiedad y nerviosismo, problemas para dormir, aumento de la presión arterial en personas que no están habituadas a la cafeína y trastornos intestinales.

Los expertos recomiendan individualizar el consumo, teniendo en cuenta factores como la edad, el peso, la tolerancia personal a la cafeína, la presencia de patología cardiovasculares, el embarazo o la toma de medicamentos que puedan interactuar con el café.

Hay que resaltar que no todos los cafés son iguales. El tipo de grano, el método de preparación y lo que se añada puede afectar notablemente el efecto final del café en el organismo. Por ejemplo, estudios han demostrado que el café filtrado como puede ser el de goteo o el americano, retienen menos diterpenos que el café hervido o sin filtrar como puede ser el café turco o el de prensa francesa. Estos diterpenos pueden aumentar los niveles de colesterol si se consumen en exceso.

Además, escoger versiones de café con mucho azúcar o siropes añadidos como los que se pueden encontrar en muchas cafeterías, puede anular completamente los efectos saludables de esta bebida, convirtiéndolo en una bebida hipercalórica que lo único que hace es favorecer el sobrepeso y el síndrome metabólico.