El consejo de Joël Dicker a los jóvenes escritores: “Trabaja, trabaja y trabaja”

Vuelve Joël Dicker a la carga con ‘Un animal salvaje’, un nuevo thriller con un ritmo y un suspense sobrecogedores que, según cuenta Miguel Manso en el vídeo, nos recuerda por qué el escritor suizo es un fenómeno editorial en todo el mundo desde ‘La verdad sobre el caso Harry Quebert’.

Los mimbres del suspense están urdidos. El 2 de julio de 2022, dos delincuentes se disponen a robar en una importante joyería de Ginebra. Un incidente que dista mucho de ser un vulgar atraco.

Veinte días antes, en una lujosa urbanización a orillas del lago Lemán, Sophie Braun se prepara para celebrar su cuadragésimo cumpleaños. La vida le sonríe: vive con su familia en una mansión rodeada de bosques, pero su idílico mundo está a punto de tambalearse. Su marido anda enredado en sus pequeños secretos.

Su vecino, un policía de reputación irreprochable, se ha obsesionado con ella y la espía hasta en los detalles más íntimos. Y un misterioso merodeador le hace un regalo que pone su vida en peligro. Serán necesarios varios viajes al pasado, lejos de Ginebra, para hallar el origen de esta intriga diabólica de la que nadie saldrá indemne.

Joël Dicker afirma que su vida personal no ha cambiado tras su gran éxito

Con motivo de la publicación en España de ‘Un animal salvaje’ (Alfaguara), Joël Dicker ha charlado con Noticias Cuatro. Cuenta que su vida personal apenas ha cambiado tras el éxito de ‘La verdad sobre el caso Harry Quebert’. Sigue viviendo en Ginebra, rodeado de su familia, sus amigos y sus costumbres de siempre.

Sobre el título de su nueva obra afirma: “Hay un animal salvaje en todos nosotros. Hay que amarlo y confiar en él. Y sobre todo hay que aprender a perdonarnos. No hay más que una vida y hay que aprovecharla”.

Preguntado sobre los consejos que le daría a un joven escritor, se muestra tajante: “Le diría implícate, que esto te enganche, trabaja, trabaja, trabaja y vuelve a empezar. Sueña. Vale la pena”.

Confiesa a la hora de escribir un libro se guía por el instinto: “Yo trabajo sin un plan preconcebido. Cuando empiezo un libro no tengo una historia, no tengo una trama, lo hago por el mero placer de escribir. Ese placer es lo que me guía durante la escritura”.