La conexión entre Carmen y Alexis ha sido tal que han podido hablar sin tapujos hasta de sus tatuajes más íntimos. A ella le encantan los hombres decorados con tinta y le ha resultado anecdótico y divertido que su cita tuviera el pene tatuado.
Carmen ha perdido las llaves y hasta seis móviles, pero jamás había conocido a alguien que no se acordara de haberse tatuado el pene en una noche de fiesta. Alexis le estaba contando que tenía muchos tatuajes y entre ellos uno en su parte más íntima. Carmen ha querido saber si le había dolido mucho, pero él no lo recordaba y le ha contado la rocambolesca historia de su tatuaje.
Carmen ha entendido todo al escuchar un “No tienes huevos” y Alexis le ha dejado claro que es una historia que nunca olvidará. A ella en lugar de asustarle, le ha parecido una anécdota divertida. Sin embargo, quién se ha asustado ha sido Alexis al saber que a Carmen le gustaba mucho salir de fiesta porque para él esa etapa ya está pasada.