Carmen, impresionada con el explosivo baile de su cita en ‘First Dates’: “He sentido que me iba a comer”

Carmen ha venido a ‘First Dates’ en busca de una hombre con “la cartera llena” y se ha encontrado con Agustín, un hombre que no era “un nobel de literatura”, pero que lo daba todo, todito, todo bailando reggaetón.

“La gente dice que me parezco a Bruce Lee”, ha asegurado Carmen una mujer camaleónica que cambia de look con mucha facilidad y que siente que en este momento se parece a Isabel Presley. De hecho, no le importaría encontrar a un hombre con “la carterita llena” que la tratara como una reina. De hecho, le ha confesado a Lidia que ella quiere ser como la Presley “Quiero un premio nobel de literatura”, está cansada de las mentiras y de tanto trabajar “Quiero ser mujer florero”.

Agustín está acostumbrado a tener opiniones en contra y ya ha decidido hacerlo que quiere y lo que opinen los demás, no importa.  El soltero ha querido sorprender a su cita con un regalito de la marca de ropa que diseña su hija y lo ha conseguido. El regalo que le ha traido para ella le ha gustado mucho, pero el look que él vestía nada de nada “Ay, Agustín, con ese chalequito de borrego con flecos como si fuera yo la cabra… ‘¡Beee!’”. No se ha querido de él, pero no le ha gustado nada.

Durante la cena, Agustín le ha dicho a Carmen que solía viajar mucho, que tenía un negocio en Kief en Ucrania y que también había estado en Cuba “me casé allí”. Al escucharle, Carmen le ha soltado “tú ibas a mojar pan” y él le ha respondido un “no, yo iba a bailar salsa” y han bromeado con que él sabía que ese matrimonio no iba a ser para toda la vida “ella era muy guapa y era la única manera de que pudiera venir a España”.

Al saber que también había viajado mucho a los países árabes, le ha dicho que si la llevaría a Egipto y él se lo ha tenido que pensar. Eso sí, Carmen asegura que lo ha dicho de broma “yo con Agustín no voy ni a comprar pipas”. Agustín le ha contado que a él le encanta bailar reggaetón y le ha detallado pasito a pasito como se movía sobre la pista “muevo la cabeza, muevo la cadera y bajo hasta abajo”. Carmen estaba flipando y ha sentido que su cita se movía cómo una lombriz. El soltero asegura que es “una bomba” y ella le ha soltado un “a ver si revienta el plató” y es que ha sentido que su cita podía ser más intento que “la bomba de Hiroshima”. Incluso, ante su insistencia ha deseado que Matías pusiera reggaetón  “y me enamoro”.

Y dicho y hecho, Matías ha puesto la música a tope y Agustín se ha venido arriba. Él ha sentido que Carmen estaba cayendo rendida a sus pies al verle moverse de arriba hacia abajo con un movimiento sexy, pero ella estaba horrorizado  y ha sentido que la iba a comer enterita. La soltera ha pedido a la cámara que le trajeran otro soltero para tener una nueva cita, pero le ha seguido el rollo a Agustín hasta el final.

Le ha pedido que la cogiera en brazos en el fotomatón, se ha reído y lo ha dato todo hasta que le ha confesado a su cita que ella era un volcán y que necesitaba a alguien que fuera explosivo todo el rato no solo al ritmo de la música como él.