Dee Lewis de Rochester, Nueva York, ha vivido uno de sus peores momentos pese su ilusión porque se iba a graduar.
“Así que, el diseñador, llamó a mi hija la noche antes del baile para recoger su vestido y le cobró 300 dólares -267 euros-. ¿Estoy equivocada por querer recuperar el dinero?”, e escribía la madre en Facebook.
En la red social, publicó varías imágenes donde la adolescente mostraba el “desastroso” vestido, que según su opinión, hizo el diseñador, quien él dijo a la joven que “iba a jugar con un estilo libre”.
Dee Lewis tuvo que buscar una solución para acudir al baile de graduación, como informa Mirror. Por ello, un amigo de la familia le ofreció el vestido que su hija llevó el año pasado en su graduación.