Tras morder la planta, Zhang, de 26 años, notó que se le entumecía la boca y que la garganta se le irritaba. Tuvo que acudir de urgencia al hospital donde la sometieron a una rápida limpieza de estómago para eliminar los componentes tóxicos de su cuerpo. Los médicos también detectaron ampollas y erupciones en las manos y caras de la mujer. Aunque le salvaron la vida, sigue ingresada recuperándose y estable, informa RT.
El agave americano es popular en China como planta decorativa. Contiene cristales de oxalato de calcio, un tóxico que produce irritación, quemaduras y trastornos digestivos severos. Su consumo en dosis mayores puede causar convulsiones, llevar al coma y provocar la muerte.