En la etiqueta del producto se puede leer que la pintura “se elimina fácilmente de la piel y de la mayoría de las telas”. Sin embargo, como descubrió al quitársela, eso no la convierte en pintura corporal.
Cuando Leah se retiró la pintura, se dio cuenta que no era del todo ‘lavable’ y decidió compartir el resultado en Twitter. Su cara completamente rosa no ha tardado en volverse viral y ser el centro de muchas bromas.
La publicación ha generado miles de retuits y ‘likes’, convirtiendo a Leah en ‘la chica más rosada del mundo’.