Según informa ’RT’, la casa situada en un pueblo cercano a Minsk, la capital bielorrusa, está decorada con numerosas calaveras, quimeras, un muro del que salen manos y números demonios. Además, cuenta con placas en las que figura el símbolo masónico del ‘Ojo de la providencia’.
No solo los niños tienen miedo a pasar por delante de la terrorífica edificación, sino también los adultos, ya que afirman que por la noche su es aún más escalofriante. "Al principio la casa parecía bonita. Mi nieta la comparó con un castillo de cuento de hadas. Pero cuando de la cerca empezaron a 'salir' manos negras y calaveras, y en el tejado aparecieron demonios, eso ya fue un exceso. Ahora no paso por delante con mi nieta. De noche, incluso adultos tienen miedo de andar por ahí. En el techo, algunos demonios brillan en la oscuridad bajo la luz de linternas", cuenta una vecina.
A pesar de las numerosas quejas de los residentes de la pequeña localidad a las autoridades, la casa seguirá con su peculiar diseño, ya que se trata de una propiedad privada.