El detenido, de 37 años, que ha prestado declaración este miércoles, ha sido imputado por un delito de homicidio, tal y como se ha informado desde el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.
La mujer murió en la casa a consecuencia de golpes que supuestamente recibió al caerse en la ducha, según contó su marido, ahora arrestado, a la policía. La fallecida presentaba hematomas en la cara, la cabeza y el cuerpo.
Cuando los agentes policiales llegaron al domicilio la mujer "ya estaba muerta" y en el piso estaban presentes la hermana del detenido, el detenido y un hermano de la mujer fallecida, "quien comentó que su hermana era víctima de agresiones por parte de su marido".
"Por las declaraciones se llegó a la conclusión de que podría tratarse de un homicidio de violencia de género y se procedió a la detención del marido", ha indicado el inspector.
Según las mismas fuentes, no había antecedentes de violencia de género ni denuncias previas por malos tratos en el matrimonio, que tiene un bebé de dos meses.