Ese arresto se produjo en el marco de la Operación Didas, cuando los agentes culminaron la investigación sobre un profesor por haber abusado sexualmente de esta alumna, sometiéndola a un fuerte control de sus actividades, hasta que ella decidió enfrentarse a su agresor y cesar los abusos. En ese momento la acosó constantemente, llegando a realizar más de 3.000 llamadas telefónicas en el periodo de un año, mensajes continuos y numerosas cartas de amor.
A raíz de esta investigación y con las evidencias obtenidas de los numerosos efectos intervenidos en el registro de su domicilio, los guardias civiles descubrieron que había sometido a abusos a otra menor de 14 años con la que habría contactado a través de las redes sociales, iniciando una relación con la misma.
Tras un breve periodo de tiempo en el que este individuo se ganó la confianza de la menor, consiguió mediante engaños concretar una cita para conocerse en persona, momento que aprovechó para consumar los abusos sexuales, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.
En ambos casos actuaba de la misma forma
En ambos casos, el detenido actuaba de la misma forma, consiguiendo engañar a sus víctimas aprovechándose en todo momento de la vulnerabilidad de las mismas. Al profesor se le acusa de los delitos de abusos sexuales y contacto con menores a través de las tecnologías de la comunicación con propósito sexual.
La autoridad judicial ha decretado de nuevo su ingreso en prisión incondicional por tales hechos, donde había permanecido hasta hacía escasos días.
La investigación, que continúa abierta ante la posibilidad de la existencia de más víctimas, ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo Emume (Equipo Mujer-Menor) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga.