Un patólogo forense confundió de cuerpo un cerebro que intentaba reubicar después de realizar la autopsia a varios cadáveres, según informa The Sun. El grave error fue descubierto por el empleado encargado de preparar el cuerpo para el funeral.
Tal y como señalan el medio inglés, este desastre es solo uno de un catálogo de errores cometidos por funcionarios que trabajan con cadáveres.
En los últimos tres años, han sido reportados 89 casos de errores de este tipo y hubo un total de 178 incidentes graves con tejido humanos, según informa la BBC.
Los órganos fueron descubiertos por los hospitales después de que el resto de los cuerpos habían sido ya entregados a sus respectivas familias hasta en 13 ocasiones. Mientras que un total de 36 cuerpos fueron devueltos a familias erróneas.
En varias de estas ocasiones, los errores fueron descubiertos después de que sus familiares y amigos ofrecieran su último adiós a un fallecido con el que no tuvieron ni la más mínima relación, y que se les había entregado otro cadáver de forma “accidental”.