El niño de ocho años habría sufrido numerosas vejaciones y malos tratos de su progenitor, que anteriormente a estos hechos, también le habría obligado a ver películas de terror para que el pequeño tuviera pesadillas.
Según el tribunal, el padre le habría pegado puñetazos y patadas en varias ocasiones, incluso se habría pretendido hacer el muerto para asustar al pequeño. El hermano pequeño del niño habría sido testigo durante meses de estos malos tratos, contrariamente a la madre, que no tenía conciencia de ellos.
La fiscalía ha puesto en conocimiento del tribunal los hechos por los que se acusa a este padre de malos tratos. Según la acusación, los episodios de violencia no sólo se limitan a los ya citados anteriormente sino que el padre habría actuado de dicha forma con el niño en otras ocasiones, incluso habría lanzado al pequeño contra el suelo, lo que le habría provocado un golpe en la cabeza.
El punto de inflexión de este caso llegó cuando el padre agredió a la madre. El niño, entonces, decidió contarle a su profesora del colegio lo que estaba pasando y se inició una investigación.
El abogado del hombre, que en el juicio ha dicho que se arrepiente de los malos tratos a los que sometió a su hijo, ha expresado también que su cliente tiene un problema con el alcohol y que está buscando ayuda.
El juez ha decretado la suspensión condicional de los 18 meses de cárcel que le corresponderían. Aun así, el acusado tendrá que realizar 150 horas de trabajo en beneficio de la comunidad y un curso de rehabilitación.