La reacción Walter Rodríguez al conocer que su hija pequeña de 11 años estaba siendo acosada ha dado la vuelta al mundo. Según han informado diferentes medios locales argentinos, la niña empezó a entablar conversaciones telefónicas con un desconocido. En los mensajes que se intercambiaban, el hombre de 29 años comenzó a ofrecerle diferentes encuentros sexuales mientras le mandaba fotografías y contenido pornográfico.
Al sentirse acorralada y hostigada, la niña decidió contárselo a su padre para que le ayudase. Fue en ese mismo momento cuando Walter Rodríguez llevó a cabo un plan poco común y es que, en vez de denunciarlo a la policía, el progenitor decidió continuar con las conversaciones con el desconocido mientras se hacía pasar por la menor.
Ante el aluvión de conversaciones que compartieron, el acosador propuso a su víctima quedar con ella para mantener relaciones y, para su sorpresa, recibió un sí como respuesta. Lo que él no sabía es que en aquel encuentro no se presentaría la menor de 11 años sino su padre. Al ver la cara del hombre que había estado molestando y acosando a su hija, Walter Rodríguez decidió pegarle una paliza y, segundos después, llamar a la policía para que lo detuviesen.
El periódico argentino Perfil ha confirmado que las autoridades se presentaron nada más recibir la llamada y fue entonces cuando le detuvieron. El Juzgado en lo Criminal y Correccional Número 23 de Buenos Aires ha sido el encargado de llevar el caso de acoso.
Según apuntan los diferentes medios de comunicación que han publicado la noticia, el detenido fue puesto en libertad al no existir una denuncia por parte de la familia de la menor aunque sobre él han caído cargos de lesiones y acoso.