Los tres llegaron al Hospital Central de la Ciudad de Xuzhou, en la provincia Jiangsu al este de China, afirmando que la chica estaba embarazada de tres meses y que necesitaba un test de rutina para confirmar que el feto estaba sano, informa Mirror.co.uk.
El marido y la suegra aseguraron que la mujer tenía 20 años, pero los médicos inmediatamente alertaron a las autoridades locales al descubrir que la joven paciente era más bien una escolar que una mujer.
Los doctores trataron de preguntar a la niña pero ella era incapaz de contestar porque al parecer no habla mandarín.
Un miembro del personal sanitario indica que “es obvio que es solo una niña y ciertamente en ningún caso se acerca a los 20 años”. Sus sospechas enfurecieron al marido, que dijo que la había llevado para ser examinada y les instó a hacer su trabajo y que “dejaran de hacer preguntas”.
Los agentes de Policía descubrieron que la chica no tiene un DNI chino y concluyeron que era extranjera, del sureste asiático, pero sus orígenes exactos no están claros. Los investigadores sospechan que fue secuestrada o traída como una novia extranjera (los chinos tienen una larga historia de compra de novias vietnamitas de la frontera).