Hace 8 años nacieron los tres primeros cachorros de lince ibérico en el centro de cría de El Acebuche, en Doñana; todo un éxito desde el punto de vista científico que se ha repetido cada año con el alumbramiento de nuevos ejemplares destinados a ser reintroducidos.
En 2013 salieron adelante un total de 44 cachorros y casi todos ellos ya están listos para ser liberados en el medio salvaje. Lo cierto es que allá afuera la vida no es fácil para ellos; a la falta de alimento por las plagas que en los últimos años han mermado la población de conejos, que constituye su principal alimento, se une caza furtiva o los atropellos. En 2013 fueron 14 ejemplares los que murieron por esta causa.
A pesar de ello, el censo de lince ibérico en Andalucía alcanzó el año pasado los 319 ejemplares. Se distribuyen entre los parques naturales de Cardeña-Montoro, Andújar y Doñana y en el entorno de los ríos Guarrizas y Guadamellato y poco a poco van ampliando su territorio.
Para este año se espera que nazca hasta una treintena de cachorros, que al igual que estos cuatro pequeños recién nacidos pasarán a formar parte de las poblaciones silvestres.