Leandra Becerra Lumbreras, de Zapopan, Jalisco (México), era una señora familiar y cariñosa, a la que le encantaba contar anécdotas de la época de la Revolución, mientras tejía en su mecedora. Hasta aquí, podría tratarse de la descripción de cualquiera señora de su edad, si no fuera porque tiene 127 años.
Leandra era la mujer más vieja de México hasta el pasado jueves 19 de marzo, cuando falleció en su casa ubicada en este municipio de la zona metropolitana de Guadalajara, tal y como publica NoticierosTelevisiva.
Nació el 31 de agosto de 1887 en el rancho el Salitrillo, municipio de Tula de Tamaulipas, al norte de México, de acuerdo con un acta expedida en 2009 por el Registro Civil de Jalisco.
Pasaba los días entre periodos de sueño que se podían prolongar hasta tres días seguidos y las visitas de sus 153 descendientes. Leandra formó una familia de cinco hijos, 20 nietos, 73 bisnietos y 55 tataranietos. Mucho cariño que no le permitía conocer la soledad.
Los médicos subrayan que la mujer estaba sana, sin ninguna enfermedad crónica, solo acusaba manifestaciones acordes a su edad.