Efectivos de Montaña de la Guardia Civil han rescatado hoy al último de los montañeros que en la tarde del sábado perdieron la vida en el Pirineo Aragonés. Éste se encontraba en el área del Ibón de Coronas, en Benasque, y su rescate tuvo que ser suspendido el sábado debido a las malas condiciones climatológicas.
Las adversas condiciones climáticas han complicando la evacuación del cuerpo sin vida de los montañeros que han sufrido sendos accidentes mortales en el Pirineo altoaragonés, del tal modo que la Guardia Civil ha tenido que suspender el rescate de uno de ellos hasta esta mañana, según informa El Alto Aragón.
En el otro extremo del Pirineo, en el municipio de Aísa, se produjo el otro accidente de montaña mortal. También en ese caso se ha precipitado al vacío, pero las condiciones climatológicas y la ventisca permitieron el rescate del cuerpo horas después del fallecimiento.
Por otra parte, la tercera víctima, fue en el Espigüete, un pico situado al norte de Palencia y con 2.450 metros de altitud, es Diego G. S., de 31 años; un vecino de Miranda y miembro de un club de alpinismo local que ya había realizado la ascensión con anterioridad. Según informó la Guardia Civil, ese montañero y otros dos amigos, todos ellos experimentados, intentaban subir a la cima por la cara norte cuando el primero se resbaló. Al parecer, la nieve y las placas de hielo impidieron que pudiera detener la caída, según informa El Correo vasco.