Cuentan que al principio pensaron que el joven, de 21 años, estaba haciendo algún truco en un puente de Waltham Cross y, por ello, lo grabaron con su teléfono móvil. Sin embargo, no tardaron en percatarse de que el hombre estaba realmente angustiado y de que iba en serio.
Por ello, los dos menores llamaron a la Policía y trataron de convencerle de que no lo hiciese. “No hagas esto, tu familia te ama, piensa en tu mamá, tu papá, tu esposa”. Sin embargo, el hombre hizo caso omiso de toda súplica y se deslizó desde la parte superior del puente a una delgada cornisa. En ese momento, los jóvenes reaccionaron rápido y le sostuvieron.
George agarró su jersey alrededor del cuello, Haci le agarró la cadera y un niño, de 12 años, le sostuvo los tobillos. "Estaba llorando y temblando. Realmente estaba luchando contra nosotros pero no le soltamos”, cuenta Haci al diario británico Mirror. Mientras le sosteníamos, añade, le dije: “Por favor, no lo hagas. Somos demasiado jóvenes para ver a alguien morir”.
Los jóvenes confiesan que “fue un instinto natural intervenir”. Sin embargo, lamentan que la “gente caminaba ignorando la situación”. Afortunadamente, no todos los viandantes actuaron de la misma manera y entre todos pudieron salvar la vida del hombre.