La portavoz de la AEMET, Ana Casals, ha explicado a Europa Press que la situación no sólo afecta a Madrid, sino a otras muchas ciudades, sólo que por ejemplo, en Avilés, un frente aliviará la situación, y en Barcelona, el mar y las brisas contribuyen a que la capa de contaminación se limpie.
El motivo por el que se produce esta capa se debe a la variabilidad climática ya que el anticiclón favorece la inversión de las capas de aire.
El aire caliente pesa menos y está encima del aire en superficie, que también está caliente y, de este modo, no puede subir para enfriarse y renovarse. Cuando el aire está más caliente en la zona más alta, el de abajo, más frío, no puede subir y, como tampoco hay viento, el aire no se renueva.
No obstante, cree que el martes podría entrar algo de nubosidad por el norte, pero no lo suficiente como para desplazar el anticiclón.
Respecto a las temperaturas, ha indicado que oscilarán levemente a lo largo de los próximos días pero que, no habrá heladas nocturnas y, hasta finales de la próxima semana no se prevé un descenso térmico.
De hecho, ha indicado que las temperaturas estarán más altas de lo normal, sobre todo las mínimas. En concreto, tanto este jueves como este viernes la diferencia va desde los 2 a los 11 grados centígrados por encima del valor medio normal para estos días en la mayor parte de España, excepto en el valle del Ebro, a consecuencia de las lluvias.
En cuanto a las mínimas, ha señalado que también están siendo más altas de lo normal para la época porque no ha entrado ninguna masa de aire del norte, sino que todas son del sur o del suroeste. De modo que este anticiclón se ha instalado no sobre una masa de aire frío previa, sino sobre una de aire caliente.