“A mi hijo de tres años y medio le gusta jugar con camiones. Le gusta hacer puzles. Le gusta comer ciruelas. Y le gusta vestir tutús”. Así comienza la carta que Jen Anderson ha compartido en su Facebook para defender a su hijo de todas aquellas personas que le critican y juzgan por llevar una falda.
Esta carta surgió como respuesta a lo sucedido cuando ella y su hijo paseaban por un parque y un hombre se acercó a ellos para preguntarle “por curiosidad” porque el pequeño llevaba una falda. “Él no tenía curiosidad. No quería respuestas. Quería asegurarse de que ambos supiéramos que mi hijo estaba haciendo- y yo se lo estaba PERMITIENDO- estaba mal”, escribió Anderson en su publicación.
Tal y como asegura en el mismo texto, el hombre hablaba directamente a su hijo, diciéndole que “ella es una mala madre”. Al día siguiente, el niño no quería salir al parque por miedo a encontrarse con este hombre. “Puedo decir esto: no me van a intimidar. No me hará sentir vulnerable o con miedo. No dejaré que extraños enfadados le digan a mi hijo que puede o no puede llevar”, concluye en esta publicación que fue compartida en más de 45.000 veces.
“A mi hijo de tres años y medio le gusta jugar con camiones. Le gusta hacer puzles. Le gusta comer ciruelas. Y le gusta vestir tutús”. Así comienza la carta que Jen Anderson ha compartido en su Facebook para defender a su hijo de todas aquellas personas que le critican y juzgan por llevar una falda.
Esta carta surgió como respuesta a lo sucedido cuando ella y su hijo paseaban por un parque y un hombre se acercó a ellos para preguntarle “por curiosidad” por qué el pequeño llevaba una falda. “Él no tenía curiosidad. No quería respuestas. Quería asegurarse de que ambos supiéramos que mi hijo estaba haciendo- y yo se lo estaba permitiendo- estaba mal”, escribió Anderson en su publicación.
Tal y como asegura en el mismo texto, el hombre hablaba directamente a su hijo, diciéndole que “ella es una mala madre”. Al día siguiente, el niño no quería salir al parque por miedo a encontrarse con este hombre. “Puedo decir esto: no me va a intimidar. No me hará sentir vulnerable o con miedo. No dejaré que extraños enfadados le digan a mi hijo que puede o no puede llevar”, concluye en esta publicación que fue compartida en más de 45.000 veces.