En el hospital de Albacete, la lista de espera para una operación de neurocirugía la componen más de trescientos pacientes. Una de ellos, la mujer de Marcial Marín, consejero de Educación de Castilla la Mancha. Debía ser intervenida de una hernia discal, al igual que otras veinte personas que llevaban más de un año esperando. Ella, que llegó después, solo tuvo que esperar diecisiete días. Su suerte fue la amistad de un cirujano, Vicente Calatayud, amigo de su marido que se saltó la lista de espera y utilizando los recursos públicos le intervino un fin de semana aprovechando que no estaba de guardia que que sí estaba en Albacete. El gobierno de Castilla la Mancha niega un trato favorable. Habla de criterios médicos. Con esta explicación le han dado el alta al asunto.
“La Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha al amparo de la L.O. 2/84 reguladora del Derecho de Rectificación solicita que publiquemos lo siguiente en relación con la información que figura arriba:
Dicha información contempla un hecho falso, porque no es cierto que la mujer de un consejero de Cospedal se saltara la lista de espera hospitalaria. El contenido de la noticia es falso, ya que liga el supuesto salto en la lista de espera de la mujer del consejero con la supuesta amistad del doctor que le practicó la operación y el consejero. Continuando con esta falsa línea argumental, su medio de comunicación asegura que la intervención tuvo lugar un fin de semana aprovechando que el cirujano pasaba sus días de libranza en Albacete y que la intervención se realizó con recursos públicos.”