La Policía Municipal de Madrid ha liberado a una mujer en el barrio madrileño de Usera después de permanecer tres días retenida en el domicilio de su expareja, quien quebrantó la orden de alejamiento.
Los agentes encargados del seguimiento habitual de la víctima de violencia intentaron contactar con la mujer en varias ocasiones. Cuando lo lograron, la víctima alertó a la policía de que se encontraba retenida por su expareja en un domicilio de Usera. También relató que el secuestrador, que había consumido varios tipos de estupefacientes, estaba muy nervioso y agresivo y ella temía por su vida. Ante estos hechos, los agentes se personaron en el domicilio junto con otra patrulla del distrito y la madre de la víctima, que estaba recibiendo mensajes de auxilio de su hija.
Cuando los agentes llegaron al portal de la vivienda, el agresor les dijo que era hermano de la víctima y que se encontraba solo en el interior del domicilio. Ante la duda, los agentes llamaron a la víctima por teléfono y contestó el mismo individuo que hablaba tras la puerta.
En una segunda llamada, los agentes escucharon una conversación de fondo en la que la víctima suplicaba al individuo que la dejara salir mientras él contestaba gritando: “De aquí no sales, puta”. Tras ello, la mujer envió un mensaje a su madre que decía “Entrad, que me mata”, por lo que los agentes solicitaron el apoyo de una patrulla de la Unidad de Apoyo y Protección a la Mujer y un equipo de la Unidad de Apoyo a la Seguridad, ya que consideraron que la entrada al domicilio era urgente y necesaria.
Así, una vez que todos los efectivos se encontraban en el lugar, entraron al domicilio, rescataron a la víctima y detuvieron al agresor.