Según ha explicado a Europa Press la portavoz de la AEMET, Ana Casals, julio superó en 2,5 grados centígrados la media del mes y en 0,3 grados la temperatura media mensual máxima que se registró en agosto de 2003. Además, ha explicado que la oscilación térmica diurna ha sido también "superior a lo normal" porque la media de temperaturas máximas diarias ha sido 2,8 grados centígrados superior al valor normal y la de las mínimas 2,2. Debido a los elevados valores de las temperaturas nocturnas, en numerosos observatorios de las áreas costeras de Andalucía, Murcia y Valencia y en algunos de Cataluña, Baleares, Canarias y Madrid las temperaturas no descendieron de 20 grados centígrados.
En términos climatológicos, Casals ha indicado que julio tuvo, a lo largo del mes, "una ola de calor" que se inició el 26 de junio y que ha estado formada por varios periodos de altas temperaturas, con algunos pequeños intervalos de temperaturas más bajas como separación. Ha destacado los valores "especialmente altos" de los días 6 y 7, cuando se superaron los 45 grados centígrados en el bajo Guadalquivir e interior de la provincia de Valencia.
Por otro lado, las temperaturas mínimas se registraron en el final de la primera decena y en los últimos días del mes. La más baja se dio en Vitoria-Foronda el 26 de julio, con 8,3 grados centígrados, seguido de Burgos-Villafría con 9,2 grados centígrados y Salamanca-aeropuerto y el Puerto de Navacerrada con 9,5 grados centígrados.
Por ámbito geográfico, ha indicado que esta treintena fue "extremadamente cálida" en "casi todo" el interior peninsular y en gran parte de la mitad este y del resto de Andalucía. Por su parte, en el resto de la Península fue "muy cálido", excepto en "algunas pequeñas áreas" del oeste de Galicia donde fue normal a cálido. Mientras, en Canarias, julio ha tenido un carácter cálido a muy cálido y en Baleares, entre cálido y extremadamente cálido.