Indignado, decidió hacer algo para derribar esta desigualdad. Regresó a su casa y se vistió con un colorido traje de su madre. Antes de salir de nuevo hacia la oficina publicó un tuit en la cuenta oficial de su empresa preguntándose que "si las mujeres pueden vestir faldas/vestidos en el trabajo, ¿puedo yo vestir pantalones cortos también?".
Su protesta fue inmediatamente recogida por la dirección de su empresa que mediante un correo a todos los trabajadores daba a conocer un cambio en las normas de vestimenta permitiendo, debido a las altas temperaturas de estos días, que el personal masculino acudiese a trabajar con pantalones cortos.
A su llegada al trabajo, seguridad le preguntó si deseaba volver de nuevo a casa a cambiarse y recuperar las bermudas pero Joy decidió mantener su actitud y permanecer con el colorido vestido de su madre, como informa La República.