Las llamas vuelven a devorar Mallorca, esta vez, el noreste. El incendio empezó a las 10 de la noche en la localidad de Artà. Con varios focos, el viento y la oscuridad dificultaron las labores de extinción de un fuego que se acercaba cada vez más a algunas casas. Se están investigando las causas del fuego, pero los vecinos dicen que se originó en un lugar poco concurrido y que todo indica que fue provocado. Las llamas han quemado unas 480 hectáreas de terreno en una zona de gran valor paisajístico muy castigada por el fuego. Las 180 personas que fueron desalojadas por precaución han podido volver poco a poco a sus viviendas. Ya se han retirado los medios aéreos. Quedan trabajando 130 efectivos que luchan para controlar el incendio cuanto antes.