"Hoy hace una semana que se murió mi madre". Así empieza un tuitero su relato, en el que muestra la importancia de mantener el buen humor durante una larga enfermedad y ante la muerte. La madre del usuario @subetealanutria falleció de cáncer, pero les regaló a sus familiares muchos momentos que les ayudarán a recordarla siempre con una sonrisa.
Este hilo de Twitter, "duro y bonito", ha servido para homenajear "a la vida y a la risa", pero también a la madre del autor y a tantas otras personas que, como ella, murieron riéndose de la enfermedad.
El usuario también explica que, durante una revisión oncológica, los médicos le dijeron que tenía los bronquios muy mal y le comunicaron que no iban a poder darle quimioterapia esa semana. "No tengo los bronquios para farolillos" fue su respuesta.
Después de ese chiste, la familia comentó con ella "que fue una lastima no haberse muerto ahí, con un chiste de Gomaespuma". También bromeó sobre la externalización de los servicios durante una crisis "horrorosa" y, cuando todo pasó, le explicaron "la pinta que tenía", a lo que ella "se partía el culo".
La mujer quería un final laico no solo porque fuera atea, sino que también se negaba a que oficiara la misa "alguien que no la conociera y la juntara con los otros finados del día". La opción preferida de la madre es que sus hijos dijeran "En el portal de Belén, Amén" y se fueran todos, pero no se atrevieron. Como tampoco se aventuraron a realizar el siguiente comentario:
Los "trastabilleos verbales de Rajoy" también estuvieron presentes en los últimos días de la madre, aunque el padre no estaba de acuerdo. "Es traer a Rajoy a un sitio en el que no me gusta que esté", comentó él. "Es reírse de Rajoy como mamá se ha reído siempre", contestó la hija.
La madre ya ocupa un lugar especial en la casa, que ha llenado de "ternura y buen humor" a sus seguidores, a quienes ha animado a compartir sus historias.