Weah Bangura, de 19 años, escapó con tan solo cinco de su país natal, Sierra Leona en África para trasladarse a Australia por ser albino, una anomalía que causa la ausencia de pigmentación de ojos, piel y pelos.
En su país, los brujos creen que los albinos poseen unos poderes sobrenaturales y que la única forma de acceder a ellos es matándolos.
En su huida en 2003, la madre del joven le cubrió la cabeza con una manta para que nadie pudiera descubrir los peculiares rasgos que lo diferencian del resto de su comunidad.
Tras estar un año en un campo de refugiados en Camerún, llegó por fin a Sídney donde su vida dio un cambio radical: de estar discriminado por ser diferente a tener oportunidades laborales.
La moda se ha convertido en su pasión y fue una gran oportunidad para dejar atrás su pasado: “La moda libertad y no importa mi pasado”, dice Weah a Daily Mail.
El joven ha triunfado esta semana como modelo tras firmar un contrato con una prestigiosa agencia, quien ve un gran futuro de Weah tanto en Estados Unidos como Europa.