Según ha informado la Delegación del Gobierno, fue el conductor de una ambulancia de transporte de enfermos el que comunicó a un efectivo de la Guardia Civil de Argamasilla de Alba que en un domicilio de la localidad, del que debía recoger a una persona de avanzada edad para trasladarla al Hospital de Tomelloso con el fin de realizarse unas pruebas médicas, había escuchando voces pidiendo auxilio, encontrándose la puerta cerrada y no pudiendo acceder al interior.
Inmediatamente se trasladaron al lugar efectivos de la Guardia Civil, y comprobaron que se escuchaban voces pidiendo auxilio que procedían del interior de la vivienda.
Para poder acceder a esta los dos guardias civiles treparon hasta el tejado desde una casa contigua, descendiendo hasta el patio interior de la vivienda de la persona que pedía auxilio, siendo imposible acceder a prestarle ayuda al encontrarse las puertas y ventanas protegidas por rejas.
Ante esta situación, solicitaron un equipo de bomberos, mientras los componentes de la Guardia Civil que se encontraban en el patio interior de la casa de esta persona consiguieron herramientas que les permitieron abrir la reja de una de las ventanas, logrando acceder al interior de la vivienda junto con uno de los bomberos que se personó en el lugar.
Una vez en el interior se localizó a una mujer de avanzada edad, caída en el suelo del cuarto de baño, encontrándose desorientada, quien manifestó que llevaba pidiendo socorro cuatro días, que sufrió un desmayo, cayó al suelo y le fue imposible volver a incorporarse por los problemas de salud que padece.
La persona auxiliada fue evacuada hasta el Hospital de Tomelloso para recibir asistencia médica.