Es muy común que los gatos se escondan en los huecos de los coches, corriendo el riesgo de morir cuando el dueño del vehículo lo arranque. Esto es lo que le podría haber sucedido a este gato siamés, que se escondió en el parachoques de un automóvil y recorrió ahí 12 kilómetros. Puedo salvar la vida gracias a unos hombres que se dieron cuenta de dónde estaba el animal e hicieron señas a la conductora para que parase en la cuneta.
Los buenos samaritanos pudieron sacar al gato con vida del parachoques y lo llevaron a un veterinario. Además, el microchip que llevaba el animal hizo que pudiera ser devuelto a su dueño, según recoge el ‘Huffington Post’.
El departamento de servicios animales de San Diego ha pedido a aquellos que aparquen su coche en la calle, que revisen que no haya ningún animal atrapado en los huecos del vehículo, ya que podrían dañarlo al arranca. Además, esperan que esta historia sirva para concienciar.